Casino

Ayer entré por primera vez a un casino mexicalense. Ya hay demasiados por toda la ciudad y parece que siempre están llenos. Los juegos de azar nunca me han gustado, por lo que mi vida había estado muy tranquila sin ellos. Nos ignorábamos mutuamente.

Ya había visto los casinos de Las Vegas y de Viejas y no he apostado un sólo centavo todavía. Que me disculpe la gente que lo hace, pero me parece una estupidez. Prefiero tomar mi dinero y depositarlo directamente en la basura, que es exactamente lo que sucede.

Es imposible convencer a un jugador de que está desperdiciando su dinero. Comienzan a argumentar que "sí puedes ganar" y comienzan las anécdotas de conocidos y que si se llevaron un día más de lo que invirtieron. Es impresionante que el ser humano quiera ser tan ciego: "El otro día gasté fulanita cantidad y me llevé tanto". ¿Hablan en serio cuando me dicen eso? ¿Se han puesto a sumar todo lo que han gastado en el casino? ¿Les enriquece el apostar?

En las Vegas ya había visto de cerca la miseria humana: Gente dormida enfrente de la máquina tragamonedas, otros conectados con su tarjeta jalando una palanca repetitivamente como zombies y otros haciendo limpias y rituales para atraer la buena suerte. Un casino es un mundo autocontenido donde tienes todo lo necesario para olvidarte de tu realidad y seguir apostando. No hay relojes, ni ventanas hacia el exterior.



Con tanto casino, Mexicali me recuerda un poco a la película It's a wonderful life. En ella el personaje de George Bailey tiene la oportunidad de ver lo que sería su pueblo si nunca hubiera nacido. Por azares del destino, el pueblo está lleno de centros nocturnos, casinos, vicio y miseria. Quizá recuerden más su remake, Back to the future 2, donde Marty McFly llega al 1985 paralelo y sucede exactamente lo mismo.


Los casinos de Mexicali, por supuesto, no se comparan a los de Las Vegas. El lujo es mucho menor, pero la fantasía es la misma: El placer, el lujo, el sentirte rey por un rato y la esperanza de hacerte millonario por un golpe de suerte. Fui al que se llama Gold Lion, creo, y de nueva cuenta no aposté nada. Me la pasé en el área del bar y di algunas vueltas por las máquinas para ver a la gente. Fue muy triste.

Me detuve a ver a una anciana que estaba jugando en una máquina. Vi que tenía 200 pesos de crédito y presionaba un botón para detener las figuras que avanzaban en la pantalla. Lento pero seguro su crédito iba disminuyendo con cada presión del botón. A veces el dinero subía un poco, cuando formaba algunas figuras, pero muy pocas veces. La tendencia era claramente hacia la nada. Aunque claro, la máquina hacía todo un escándalo cuando la señora "ganaba". Me pareció un espectáculo deprimente y decidí seguir recorriendo el resto de las máquinas con la amiga que me invitó.

La cerveza es increíblemente barata. La media cuesta diez pesos. Hay agua y soda gratis para los jugadores. Tomé varias botellas de agua durante mi estancia, no tomo soda. Compramos unos nachos con carne asada y vimos a las personas del bar. También fue interesantísimo. Obviamente hay muchas personas que no están tan interesadas en el juego, más bien en el alcohol barato. Una estrategia perfecta: Si alguno de ellos siente la curiosidad de jugar, es muy posible que quede enganchado.

La comida y bebida no es la principal fuente de ingreso de los casinos. ¿Para qué intentar lucrar con eso cuando la misma gente regalará su dinero en las máquinas? Se pueden dar el lujo de darlo al costo. Con tener a las personas dentro del casino hay probabilidades de que jueguen en las máquinas. Vi muchas personas a las cuales me daban ganas de decirles: "Tú no deberías estar aquí". ¿Pero quién soy yo para hacer eso? Por mi parte, nunca jugaré. Me parece estúpido e irracional. A veces me dicen: "¡Es que nunca has experimentado la emoción de ganar!". ¿Ganar qué? Siendo sinceros, yo no vi ganadores ahí adentro.

Cuando ya nos íbamos me detuve para ver en qué había terminado el juego de la anciana. Su crédito estaba a punto de llegar a cero pero seguía presionando el botón. En el último juego la máquina hizo una pausa dramática: Las figuras se detuvieron pero la última línea siguió rotando durante mucho tiempo. La señora golpeaba la pantalla con desesperación, como intentando alterar su funcionamiento. Quería recuperar todo lo perdido en ese último juego. No sucedió.

4 comentarios:

Lalo Márquez dijo...

Interesante tu primera experiencia, Miguel, saludos!

Anónimo dijo...

Saludos Chico, yo trabaje de coordinadora de viajes a Casinos y el asunto que planteas es cierto pero creo que estas observando desde la parte mas critica. Desconozco honestamente los casinos de Mexicali, pero en mi experiencia con los de estados Unidos, quienes los visitan son personas de la 3 edad, gente sola con mucha o poca lana pero usualmente aburridos de la vida, y el casino les ofrece una oportunidad de pasar el tiempo con personas de su edad, donde todo es gratis o muy barato (comidas y bebidas) y donde gastarse en el azar les parece mas divertido que el quedarse a cuidar a los nietos o ir a la iglesia a pensar en que moriran pronto.

En lo personal pienso quelos casinos estan mal y denigran la conducta humana, pero es un bien hipocrita tanto como los bares, los table dance, etc.

La proxima vez que vayas a un Casino trata de divertirte. Saludos!

Anónimo dijo...

Hola Miguel. Soy el primer ser humano que supo de tu existencia, y tu primer médico. Es grato saber de tu experiencia en los casinos y en particular los de Mxli,pero te comparto una observación: jugar con videojuegos es gastar tambien el tiempo en nada, perdiendo de la misma manera dinero (la PC no es gratis, ni su mantenimiento ni su consumo de electricidad) pero se juega en solitario, ello es más triste. Ejerces la misma critica hacia esos jugadores? Por lo demás, te felicito por tu trayectoria, y te recomiendo no ser tan autoritario con los alumnos de la prepa, la huella de un maestro en sus mentes deja un recuerdo indeleble. Héctor Algrávez.

D.R.G. dijo...

Los casinos de Mexicali son la cosa mas aburrida del mundo, y creo que hay mas gente enferma de ludopatia que de jugar muchos videojuegos como lo dice el tipo de aquí arriba.

Por lo menos los videojuegos te agiliza la mente, cosa que dudo que las maquinitas del casino hagan.

Saludos!